El pasado viernes día 18 tuvo lugar una nueva edición de Música y Poesía en la Ermita, en esta ocasión y como va siendo habitual en esta temporada fue presentado por Doña MaríSaro Marrero González.
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Momentos de la presentación a cargo de MariSaro Marrero González |
Se leyeron poemas de Antonio González Croissier, los cuales pusieron la voz MariSaro Marrero González, María Delía González Croissier, Inmaculada Blanco Ruíz, Carolina Cabrera González, e Iván Cabrera González.
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Trío Estelar |
La actuación musical corrió a cargo del Trío Estelar.
Pueden saborear unos poemas leídos en este acto:
DAME
Dame un instante para mezclarlo con mi vida y fabricar un
buen recuerdo, dame una mirada llena de misterio para inventar
una historia, dame esa imagen que inmortalicé en algún lugar
de la existencia para volver una y otra vez contigo, dame esa
pizca de nostalgia para recordar un sublime encuentro, dame algo
que pueda decir que es tuyo para abrazarme a él y sentir que
estás cerca. Pero si tu mirada se convierte en
desprecio cuando acaricia la mía y el silencio
se transforma en pesadilla, entonces lo mejor será disponer todo para el olvido, hacer
no ovillo con la indiferencia alrededor del orgullo
e ir soltando hilo al tiempo, ese que siempre decide lo imposible, deshace lo probable y desdice lo
razonable. Dame un instante para creer, otro para soñar y toda la vida
para desearlos.
ES EL TIEMPO
Qué
extraño es a veces el sueño en la noche, capaz de convocar a los más lejanos recuerdos y hacerlos bailar alrededor
del mismo fuego, que extraño es
despertar en la mañana y, durante unos preciosos segundos, no saber si aún existimos o respiramos, si vivimos o soñamos.
Son esos cortos instantes en los que se cruza el sueño en retirada con la conciencia que nos ocupa, en los
que dejamos de ser la imagen de
nosotros mismos para convertirnos en la luz que nos ciega, el miedo que nos embarga o el placer que nos
desea. Quizá sea ese el tiempo del espíritu, la cara del alma o el lugar donde
se esconden los secretos, cuando se pierde toda certeza y se sacuden las
ideas.
Es el
tiempo de despertar, de recoger el frío al borde de la cama, las
fuerzas de la larga espera y la ilusión por lo que aguarda para levantar la mirada, ver cómo
arde la mañana aclarando las sombras y perseguir
el día en busca del ocaso mientras fabricamos nuestros recuerdos.
Qué extraño es a veces sentir como, al llegar la
noche, se suceden nuestros sueños.
UN LUGAR DE ENSUEÑO
Si en algún momento la luz se apagó y, agitando
ansiosamente las manos, clavabas la mirada de ojos
abiertos en la más oscura de las sombras, Si en alguna ocasión has
necesitado desesperadamente hombros y te has encontrado con una inmensa
soledad, si en los malos tiempos solo escuchaste gritos
mientras reclamabas un poco de aliento, si has sentido el
precipicio tan cerca como para dejarte llevar por el vértigo,
entonces debes ser consciente de tu sabiduría, de esos ojos que ven sin luz, de esas voces que suenan muy adentro, de esos golpes que crecieron en caricias, de ese aire
fresco que te mantuvo firme. Pero no confíes el peso de tu vida al bastón
del conocimiento porque no hay rama que
soporte firme el paso del tiempo.
Así debo decir que de las sombras cogeré su misterio, de la soledad su largo
silencio, de los gritos su ausencia y del vértigo su advertencia para
construir, con los años, un lugar de ensueño...